Cuentos escritos a máquina. Libros infantiles para desarrollar la imaginación

Libros de humor absurdo para niños

Gianni Rodari es uno de mis autores preferidos, en lo que a contar cuentos se refiere. Sus asociaciones de personajes y mundos imposibles le hacen construir cuentos de todo tipo en los que es imposible no levantar sonrisas. Rodari es un genio de la palabra absurda, del humor alocado pero con cabeza, de los diálogos de besugos bien pensados, pero todo en versión infantil.

Cuentos escritos a máquina lo escribió en 1973, y recoge 26 cuentos que, evidentemente, están escritos a máquina. No es tan obvio como pudiéramos pensar en un principio, pues también tiene Cuentos por teléfono. Estos cuentos, en concreto, a parecieron semanalmente en la tercera página del diario Paese Sera.

Libros para niños. El humor absurdo de Gianni Rodari

Cuentos escritos a máquina

Se trata de relatos cortos e independientes aptos para un público a partir de 10 años, ya que, aunque sus textos no son complicados de entender, lo cierto es que rebosan tanta ironía que hay que saber entenderla para poder reírse con los pequeños matices.

En sus historias se unen mundos distintos, hay giros inesperados, asociaciones de ideas imposibles, deja finales abiertos, pero sobre todo, son divertidos, creativos y sorprendentes.

Puede que los niños noten que se han quedado un poco anticuados, pues no aparecen móviles, ni tablets, ni reggaetón, pero os aseguro que en los mundos de Gianni Rodari no hacen falta todas esas cosas, son tan alocadamente absurdos por sí mismos, que tenerlos encima distraería a los personajes de su verdadera misión: despistar y descolocar la mente del lector.

Rodari no decepciona en absoluto, no cansa, no aburre, y no pasa de moda, porque el absurdo es tan inmortal como lo es el humor, y siempre viene bien vestir al mundo con un velo de risa para darnos cuenta de que las cosas ni son tan importantes, ni son siempre lo que parecen, y que nosotros podemos manejarlas en nuestra mente como nos apetezca.

Y para que tengáis una pequeña idea de qué os hablo, aquí os dejo el cuento de Marzo. La tarjeta postal.

"Érase una vez una tarjeta postal sin dirección. Solo estaba escrito: "Recuerdos y besos". Y debajo la firma: "Pinuccia". Nadie podía decir si esa Pinuccia era señora o señorita, una vieja gruñona o una chavala con vaqueros. O a lo mejor una espía.
A mucha gente le hubiera gustado quedarse al menos uno de aquellos "recuerdos" y de aquellos "besos", al menos el más pequeñito. Pero ¿cómo fiarse?"

Como veis, Rodari no es nada aburrido, desconcertante sí, pero no aburrido. Sus cuentos tienen un ritmo ágil, y fácil, aparentemente banal, pero nada más lejos de la realidad, porque tras estas simples historias se esconde una gran crítica de la sociedad de entonces. ¡A saber lo que diría si escribiese en la sociedad actual!... no lo sé, pero seguro que nos daba la vuelta, nos ponía patas arriba, luego de lado, y nos daba, de paso, después de reírse un buen rato, una gran patada en el trasero.

Si tienes más de 12 años, debes leer a Gianni Rodari.

Cuentos de Giani Rodari