Por qué debes dejar que tus hijos jueguen en el barro

Jugar con barro es fuente de aprendizaje y de felicidad para los niños

"Nooooo", es el monosílabo que más usamos padres y madres cuando nuestro pequeño se acerca a un charco dispuesto a rebozarse en barro. Solo pensamos en lo sucio que se va a poner, en cómo quitar la porquería de las zapatillas y en que puede acatarrarse. 

Si bien eso es lo que pensamos los padres, muchos psicólogos y educadores tienen otra actitud hacia estos juegos. Y es que puede ser una increíble fuente de aprendizaje y, sobre todo, de felicidad. Te explicamos por qué debes dejar que tus hijos jueguen en el barro.

¿Deberían jugar tus hijos en el barro? Los expertos dicen que sí

Por qué debes dejar que tus hijos jueguen en el barro

Los niños no tienen la noción de suciedad que tenemos los adultos. Es por ello que no se inmutan si tienen la cara llena de tomate, un espagueti pegado a la camiseta o las uñas llenas de arena. 

En edades tempranas, los bebés no conocen la sensación de asco, es por ello que les atrae lo pegajoso, pringoso y cochino que tienen al alcance de su mano. Seguro que incluso sabes de historias de bebés que meten las manos en el váter o que toman con sus manitas cacas de perro en el parque. Para el niño no es repugnante, es una fuente de información y experimentación. 

A los niños les encanta descubrir, tienen una necesidad natural de moverse, quieren chillar hasta que nos pitan los oídos, se desbocan hasta que sus mofletes están rojos y sus cuerpecitos sudando. Cuando gastan esa energía que llevan dentro,  se sienten bien y eso fortalece su autoestima.

Sin embargo, cada vez más expertos coinciden en el hecho de que estamos criando niños burbuja. No les dejamos tirarse por un terraplén, ni acercarse a algunas plantas del parque, ni saltar charcos, rebozarse en barro... Todo esto que quizás hiciste tú en tu infancia, es una absoluta fuente de aprendizaje y, de felicidad. Los niños son felices cuando tienen un espacio en el que experimentar, incluso aunque se ensucien. 

La psicóloga alemana Helga Gürtler es partidaria de dejar explorar a los niños "Los niños tienen una enigmática alegría por todo lo que está embarrado y huele mal. "Hacer un muffing con barro o incluso revolcarse en él hasta que parecen un lechón. ¿Recuerdas lo divertido que puede ser? ¿Qué tan cómodo puedes sentirte en tu propia piel? Los padres pueden ayudar a los niños a explorar el mundo con todos sus sentidos, a hacer papilla con arcilla o papel maché, a construir castillos con arena o masa",

Y es que, jugar con barro no solo no es malo, sino que aporta múltiples beneficios tanto a nivel físico como emocional. El barro, por más que ensucie, no es otra cosa que un material similar a la arcilla, y este como sabrás, es un material ideal para que los niños jueguen, aprendan, desarrollen su imaginación y estimulen los sentidos.

Beneficios para los niños de jugar en el barro

- Jugar con barro es una forma sencilla de conectar con la naturaleza y aprender sobre los distintos elementos del entorno ya que les ayuda a diferenciar texturas y grados de humedad.

- Un elemento como el barro permite a los niños trabajar la motricidad tanto fina, como la gruesa.

- Modelar con barro estimula la imaginación y la expresión artística. 

- Basta observar a un niño cubriéndose de barro, modelando con barro o saltando sobre él para saber que está muy cerca de la felicidad absoluta.

- Una de las cosas que más nos preocupa cuando nuestros hijos se ensucian es que contraigan alguna enfermedad. Sin embargo, no es necesario vivir en un ambiente estéril, los expertos afirman que ensuciarse es bueno para el sistema inmunológico. 

- En relación a las habilidades sociales, el barro permite el juego tanto individual como grupal, promoviendo así la cooperación con los demás e incluso la comunicación.

Viendo todos los beneficios del barro, no es extraño que a los niños les encante jugar con él, a pesar de que a ti te ponga los pelos de punto. Y es que, más allá del beneficio cognitivo que pueda tener, lo realmente importante es lo que disfrutan. Los niños son felices jugando en el barro. 

 


Artículos relacionados

Comentarios

¡Sé el primero en comentar!