¿Por qué son tan rebeldes nuestros adolescentes?

Sugerencias para ayudar a canalizar el exceso de rebeldía.

La adolescencia es una etapa de gran interés por la complejidad de modificaciones psicológicas y físicas que implica. Se trata de un periodo crítico cuya meta principal es fijar la identidad de adulto y en la que existe la creencia básica de pérdida del vínculo paterno y materno para encontrarse consigo mismo; los cambios hormonales condicionan el aspecto físico y se definen los rasgos fundamentales de la personalidad. Puede ser un periodo estimulante de la vida si está fuerte la autoestima del adolescente para soportar los cambios físicos y emocionales, pues el proceso de maduración somática condiciona el comportamiento y el /la adolescente se encuentra inmerso en conflictos internos y afectivos.

Antes del siglo XX la adolescencia no se consideraba una etapa de desarrollo, se pasaba directamente de la pubertad al mundo adulto. Los cambios fisiológicos son significativos, podemos hablar de "estrenar cuerpo", territorio corporal, asunto propio y de búsqueda de modelos "Yo quiero ser como tú" El adolescente explora otros lugares de identificación fuera de la familia: los?youtubers, los amigos virtuales de las redes sociales, los compañeros del instituto o los amigos del parque...

Cuando hablamos de rebeldía adolescente debemos tener en cuenta que son muchos los factores que pueden influir para la aparición de esta forma de comportarse no exenta de desafíos. Es la edad de las rebeliones frente a la sociedad, frente a las costumbres, frente a los padres...

Etapas de la Adolescencia

  • Periodo Inicial (11-13 años) Referencia a sus cualidades personales, roles muy diversos (posiciones muy diferentes y variadas). Comienza el Egocentrismo.
  • Periodo Medio (14-15 años) Conflicto de Identidad (Todo el mundo está centrado en lo que ellos/as hacen o piensan: "Egocentrismo adolescente" Se crea su fantasía, el mundo bajo su punto de vista)
  • Periodo Final (16-18 años) Más estabilidad en los rasgos del YO, más integración de rasgos contradictorios. Su punto de vista ya no es tan radical.

La rebeldía adolescente

¿Qué puede llevar a un adolescente a mostrarse rebelde?

Daniel J. Siegel en su libro Tormenta Cerebral, dedicado a la adolescencia, nos habla de cambios significativos debido a una reconstrucción de la zona prefrontal:

  1. Búsqueda de novedades: creciente necesidad de gratificación, probar cosas nuevas. Más importancia a las emociones y menos al riesgo de comportamientos peligrosos.
  2. Implicación social: mejora la conexión entre iguales. Los jóvenes aislados de los adultos soportan conducta de riesgo mayor.
  3. Aumento de la intensidad emocional: mayor vitalidad, impulsividad, reactividad a veces negativa. "chispa emocional"
  4. Exploración creativa: sentido ampliado de la conciencia. Resolución de problemas "fuera de lo establecido". Nuevas ideas, aplicación de innovaciones.
  5. Aumento de la actividad de los circuitos neurológicos de dopamina.
  6. Liberación natural de dopamina: sensación de "estar vivo", acciones para fijarse sólo en la gratificación positiva, no importan los riesgos ni las desventajas.
  7. Liberación de dopamina: aumento de impulsividad, susceptibilidad a la adicción, hiperracionalidad (mucho más peso al resultado positivo y mucho menos a las consecuencias negativas aún siendo muy conscientes).
  8. Avance en la Adolescencia: pensamiento esencial (contexto más amplio, no solo gratificación).

Además debemos tener en cuenta que este periodo se caracteriza por la falta de control emocional, cualquier situación puede provocar una mezcla de emociones que el joven aún no sabe gestionar... Además necesita sentirse capaz de tomar sus propias decisiones y poner a prueba los límites que ha admitido durante sus primeras etapas de vida. La inestabilidad psicológica propicia críticas hacia su entorno más próximo y actúa sin pensar las consecuencias de sus actos además de encontrarse en conflicto constante entre el deseo de ser independientes de sus padres y el darse cuenta de todo lo dependientes que son en realidad. Oposicionismo adolescente en ocasiones sin propuesta de alternativas, sin argumentaciones...

La búsqueda de identidad en la adolescencia

Probablemente la tarea más importante del adolescente es la búsqueda de identidad. Dicha búsqueda puede presentarse de varias formas: desarrollando los propios valores, sintiéndose orgullosos por las realizaciones personales que van consiguiendo y manteniendo relaciones estrechas con otros chicos de la misma edad. Los adolescentes se ven muy influidos por sus iguales, se identifican con el grupo y tienden a hacer lo que la mayoría haga, pues se consideran más capaces que los adultos para comprender la amistad y las cosas importantes de la vida.

En esta etapa se produce con frecuencia una inclinación a intensificar los contactos socialesy a enfrentarse a los progenitores; es la edad de las rebeliones frente a la sociedad, frente a las costumbres y por supuesto frente a los padres; es la edad de las actitudes excéntricas, despreciativas y orgullosas que constituyen un intento de reafirmarse uno mismo frente al medio. Los jóvenes sienten un conflicto constante entre el deseo de ser independientes de sus padres y el darse cuenta de todo lo dependientes que son en realidad. En esta lucha rechazan la ayuda y guía de sus progenitores e ignoran las opiniones de estos, pues las consideran pasadas de moda o irrelevantes y, de manera provocadora, dicen y hacen cosas que suscitarán ofensas en los mayores.

Los sentimientos ambivalentes de los adolescentes son parejos a los sentimientos ambivalentes de sus propios padres, pues se debaten entre el deseo de que sus hijos sean independientes y el deseo de que sigan dependiendo de ellos; pero los jóvenes tratan de encontrar sus propios valores en una sociedad confusa y se preocupan mucho por la autenticidad de las personas a las que tienen como modelos. Por esta razón, si detectan cualquier desviación entre el comportamiento esperado y el comportamiento real de la persona a quien admiran, la acusarán de hipocresía, pues no entienden que a aquellos adultos que pueden haber encontrado sus propios valores les cueste tanto trabajo vivir de acuerdo con ellos. 

Los adolescentes necesitan libertad para tomar sus propias decisiones, les gusta conocer la actitud de los padres ante los problemas, pero ellos quieren elaborar sus propias conclusiones y desean ser escuchados, respetados y que se los tome en serio. No obstante, los conflictos intergeneracionales surgen cuando los jóvenes desean hacer cosas para las cuales según sus padres no están preparados. Una vez que padres e hijos alcancen un equilibrio entre lo que está y no está permitido, desaparece este tipo de conflicto.

Durante los primeros años los adolescentes tienen varias identidades, desarrollo de múltiples "yo", probando diversos roles y personalidades. Según los expertos encontramos cuatro caminos hacia la identidad: 

  1. Difusión: Dificultades para cumplir las demandas habituales que hacemos a los adolescentes, p. ej. Completar tareas escolares, pensar lo más conveniente para su futuro...
  2. Identidad Prematura: Los adolescentes aceptan y adoptan roles y costumbres familiares en lugar de explorar alternativas, p. ej. Padre médico=hijo médico...
  3. Identidad Negativa: Desafío, rebeldía. P. ej. Padre o madre maestros o catedráticos, hijo/a se niega a ir a la Universidad... 
  4. Moratoria de la Identidad: Pausa en la formación de la identidad. El adolescente se enfrasca en un viaje aventurero, en una misión religiosa...

Sugerencias para ayudar a canalizar el exceso de rebeldía

La comunicación y la confianza que mantengamos con y en nuestros hijos durante los años previos a esta etapa serán muy importantes para afrontar esos comportamientos tan complejos. Es muy necesario invertir tiempo y energía cuando el adolescente se encuentre dispuesto a hablar con nosotros... quizá las normas no han sido demasiado consensuadas por ambas partes.

En ocasiones tendemos a responsabilizar a nuestro hijo con tareas que no le corresponden pues pensamos que "ya tiene una edad" y sufre una presión que no le corresponde... Llevar a cabo su rol correspondiente en el momento actual requiere una toma de conciencia familiar. 

Para una buena relación es importante:

  • Darnos cuenta de que los adolescentes en sí mismos son una identidad.
  • Tomar conciencia de que precisan un espacio personal.
  • Incrementar la comunicación cuando estén dispuestos/as.
  • Ayudarles a reflexionar.
  • Recordarles con anticipación las tareas que son de su responsabilidad.
  • Ayudarles a reconocer y a hablar de sus emociones.
  • Enseñarles a no tomarse las situaciones que suceden a su alrededor de forma demasiado personal.
  • Reforzar su autocontrol predicando con nuestro ejemplo.

Cinco pasos para hablar con adolescentes

  1. Reconoce la realidad de tu adolescente (empatía)
  2. Escúchala/lo de manera activa.
  3. Adapta tu perspectiva a su modo de ver las cosas.
  4. Confirma lo que escuchas, él o ella notará tu atención.
  5. Responde con suavidad.

Frases que los adolescentes "no quieren oír" 

  • "Ya te lo dije..." 
  • Porque sí": "Porque lo digo yo, porque estás en mi casa..."

Ana Roa, pedagoga y psicopedagoga

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