Ni caramelos ni cachorros: trucos para proteger a tus hijos de los desconocidos

Cómo evitar que tus hijos se vayan con extraños


Publicado por Patricia Fernández, bloguera y periodista especializada en ocio y tiempo libre
Creado: 9 de mayo de 2025 13:49 | Modificado: 9 de mayo de 2025 13:56


La seguridad infantil preocupa a cualquier familia, y es lógico. Pero tranquilo, no se trata de asustarlos tanto que no quieran salir ni al parque. Lo importante es enseñarles ciertas normas básicas que les ayudarán a reconocer y evitar situaciones peligrosas, sin crearles ansiedad.

Trucos para que los niños no se vayan con desconocidos

¿Quién es realmente un extraño para tu hijo?

Aunque solemos pensar que el peligro viene de desconocidos, la realidad es que muchos problemas ocurren con personas cercanas o conocidas. Por eso, educar a los niños para que identifiquen cuándo algo "no pinta bien", incluso si es el vecino simpático o un familiar lejano, es fundamental.

No se trata de volverse paranoico, pero como dice el refrán: "más vale prevenir que lamentar".

Pautas sencillas para mantener a tus hijos seguros

Te proponemos varias normas fáciles de explicar y memorizar, especialmente para cuando estéis en lugares públicos:

1. Nada de aceptar regalos de desconocidos

La regla de oro es clara: nunca aceptar caramelos, regalos o golosinas de personas extrañas o poco conocidas. Mejor pasar por desconfiado que tener que arrepentirse luego. Dile que los guarde y te los enseñe después, por si acaso.

2. La contraseña secreta familiar

Establece una palabra secreta que solo conozcáis tú y tus hijos. Si alguien dice venir de tu parte y no conoce esta palabra, tu hijo debe saber claramente que no debe ir con esa persona, aunque sea conocido. ¡Que salga corriendo como si no hubiera mañana!

3. Prohibido ir con desconocidos por muchas mascotas que prometan

Si alguien invita a tu hijo a ver algo "muy mono" como un cachorro o gatito, o le pide ayuda con algo llamativo, debe pedirle la contraseña. Sin la palabra mágica, nada de seguir a nadie.

4. Enseñar a pedir ayuda a gritos

Explícale que, en caso de peligro, debe gritar claramente "¡socorro!" o "¡estos no son mis padres!". Es vital que lo haga con fuerza y sin vergüenza, para atraer rápidamente la atención.

5. Secretos con adultos, ¡ni hablar!

Dile claramente que ningún adulto debería pedirle que guarde secretos, y que, si lo hacen, lo primero que debe hacer es decírtelo. Los únicos secretos válidos son las sorpresas familiares, nada más.

6. El "no" firme y alto

Los niños deben saber que pueden y deben decir "NO" en voz alta cuando alguien les incomoda o asusta. Un "no" a tiempo es la mejor defensa contra situaciones peligrosas.

7. Privacidad familiar a salvo

Es fundamental enseñarles que no deben dar información personal o familiar a desconocidos. Evita camisetas con nombres visibles y cuida la información que compartes en redes sociales, porque cuanto menos sepan los demás, mejor.

8. Siempre cerquita de mamá y papá

Hazles entender la importancia de no alejarse demasiado en lugares públicos. Un truco es preguntarles cómo se sentirían si tú fueras quien desapareciera, lo que les ayudará a comprender lo fundamental que es permanecer cerca.

9. Si se pierde, quieto y busca ayuda segura

Si tu hijo se pierde, debe quedarse quieto donde se dio cuenta y buscar ayuda del personal del lugar. Nunca debe salir solo del establecimiento. Esto no es momento para juegos de escondite.

10. Solos en casa, pero discretos

Cuando estén solos en casa, explícales que nunca deben decirlo por teléfono ni a través de la puerta. Una respuesta sencilla como: "Mis padres están ocupados, ya les avisaré", es suficiente para mantener la seguridad.

Habla con calma, no dramatices demasiado

Explica estas reglas de forma relajada y tranquila, para que no generes ansiedad o miedo en los niños. Enséñales que son normas para que estén preparados y tranquilos, no para que teman cada paso que den.

Realiza ejercicios en casa de forma lúdica, sin dramatizar demasiado. Así aprenderán cómo reaccionar correctamente sin sustos y estarán preparados si llega a ocurrir alguna situación real.

Enseñar a tus hijos estas sencillas reglas de seguridad es una tarea importante que requiere paciencia y claridad. Manteniendo siempre una comunicación abierta, conseguirás protegerlos eficazmente sin quitarles la alegría natural de ser niños.

 

Artículos relacionados

Comentarios

¡Sé el primero en comentar!