¿Cómo aliviar la candidiasis bucal del bebé?

Unas manchitas blancas cubren la lengua, el interior de las mejillas y hasta las encías de tu bebé. Y parece que eso le causa molestias, porque se pone a llorar en cuanto succiona el pecho, el biberón o el chupete. Puede que padezca una candidiasis bucal.

¿Qué es la candidiasis bucal?

Es un tipo de candidiasis, una afección causada por una levadura, un hongo microscópico: el Candida albicans. Este elemento, presente en nuestro organismo, contribuye al equilibrio de nuestro sistema digestivo. Sin embargo, cuando la presencia de Candida albicans es excesiva, provoca un desequilibrio de la flora intestinal y puede causar una infección.

La candidiasis bucal se manifiesta principalmente por la presencia de unas manchitas blancas (como una capa parecida al queso fresco) en la boca, la lengua, el interior de las mejillas, el paladar y las encías.

El llanto del niño cuando mama, toma el biberón o succiona el chupete puede ser un síntoma de candidiasis bucal, sobre todo si tiene el interior de la boca cubierto de una capa blanca.

Con menor frecuencia, la candidiasis bucal contamina todo el sistema digestivo, provocando diarreas y enrojecimiento alrededor de los órganos genitales y del ano.

¿Cómo se transmite la candidiasis bucal?

Durante el embarazo, la alteración hormonal puede afectar al equilibrio entre los diferentes organismos provocando que el Candida albicans se desarrolle de forma excesiva. Es algo que también puede ocurrir después de haber tomado antibióticos.

Generalmente, el bebé se contagia durante el parto, por vía vaginal.

También puede contagiarse si le das el pecho y coges una candidiasis por haber tomado antibióticos. Lo mismo podría ocurrir si tu bebé se ve obligado a tomar ese medicamento.

¿Cómo se cura la candidiasis bucal?

Aunque la candidiasis bucal no suele ser una infección grave, sí puede resultar muy molesta para el bebé. Por eso es importante tratarla cuanto antes, para que pueda mamaro tomar el biberón sin dolor y no pierda peso. Ante la mínima duda, lo mejor es consultar con el pediatra y que sea él quien confirme el diagnóstico.

El tratamiento suele ser local, es decir, aplicado directamente en la boca del bebé. Lo habitual es que el médico recete un medicamento antifúngico (contra los hongos) en forma de gel, solución o gotas, que se aplica varias veces al día sobre las zonas afectadas. Si estás dando el pecho, es posible que también te indiquen tratamiento para ti, de manera que no os vayáis contagiando el uno al otro de forma continua.

En algunos casos, además del antifúngico, el profesional sanitario puede recomendar el uso de gasas empapadas en una solución suave (por ejemplo, agua con bicarbonato en la proporción que indique el médico) para limpiar con delicadeza la boca del bebé. No hay que rascar ni frotar con fuerza las placas blancas, porque podrías irritarle la mucosa y hacerle daño. Es importante seguir el tratamiento durante todos los días indicados, aunque las manchas parezcan haber desaparecido antes.

¿Se puede prevenir la candidiasis bucal del bebé?

No siempre es posible evitarla por completo, pero sí se pueden tomar algunas medidas para reducir el riesgo de contagio y las recaídas. La higiene, en este caso, juega un papel clave.

Si das el pecho, conviene lavar los pezones con agua limpia después de las tomas y secarlos con cuidado, sin frotar en exceso. Mantener la zona seca y cambiar con frecuencia los discos de lactancia ayuda a que el hongo no encuentre un ambiente tan favorable para crecer. Si tu bebé toma biberón, es fundamental lavar bien biberones, tetinas, chupetesy cualquier utensilio que se lleve a la boca, dejándolos secar al aire después de cada uso.

También puede ser útil ofrecer al bebé un poco de agua (siempre que el pediatra lo considere adecuado para su edad) después de las tomas, para ayudar a arrastrar los restos de leche que quedan en la boca. Y, ante cualquier tratamiento con antibióticos, tanto en la madre como en el bebé, conviene estar especialmente atentos a la posible aparición de las típicas placas blancas.

La candidiasis bucal es una infección frecuente en los primeros meses de vida y, aunque asuste ver la boca del bebé llena de manchas blancas, suele responder bien al tratamiento y se resuelve sin complicaciones con la ayuda del pediatra y unas sencillas medidas de higiene diaria.

Frédérique Odasso
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