Alergia a los hongos en los niños

Causas y tratamientos de la alergia a los hongos en los niños

La alergia a los hongos en niños es un fenómeno cada vez más reconocido en el ámbito médico, con una prevalencia en aumento en muchas partes del mundo. Aunque los hongos son una parte natural del entorno, para algunos niños, pueden desencadenar respuestas inmunológicas adversas, desencadenando síntomas que van desde leves a graves. Esta condición presenta desafíos únicos en términos de diagnóstico, manejo y calidad de vida para los afectados y sus familias.

 Dra. Marta Ferrer Puga Especialista en Alergología Consultor. Departamento de Alergología CLINICA UNIVERSIDAD DE NAVARRA

Alergia a los hongos en los niños

¿Qué es la alergia a los hongos?

Es una reacción alérgica que consiste en que nuestro organismo percibe como algo nocivo una sustancia, normalmente una proteína, (que denominamos alergeno) que no lo es. Este contacto pone en marcha una respuesta inmunológica exagerada que se manifiesta en diversos órganos del cuerpo.

¿Cual es la causa de la alergia a los hongos?

Los hongos son alérgenos de los que se habla poco y, sin embargo, son altamente alergénicos, afectan sobre todo a niños y no son fáciles de eliminar. Algunas esporas de hongos tienen capacidad alergénica, pues existen un tipo de ellas que se hallan en el aire libre.

Los principales géneros de hongos causantes de alergia son Alternaria, Aspergillus, Cladosporium y Penicillium, siendo Cladosporium en el norte de Europa y Alternaria en el área mediterránea. Las esporas fúngicas se encuentran en el aire a concentraciones muy superiores a las de los pólenes y en muchos casos son más pequeñas que los granos de polen, pudiendo alcanzar así más fácilmente el tracto respiratorio inferior y producir asma.

Las esporas están presentes en la atmósfera a lo largo de todo el año, pero comienzan a concentrarse en cantidades más elevadas en los meses de primavera y muy altas en verano. A diferencia del polen, las esporas de los hongos aumentan o disminuyen cuando se dan determinadas condiciones climáticas. Así, suben repentinamente concentraciones altísimas antes de una tormenta de verano, y pasada la tormenta vuelven a descender también bruscamente. Otras esporas suelen estar en el suelo y su concentración aumenta cuando se remueve la tierra. Existen otros hongos alergénicos que se hallan dentro de las casas y, sin seguir un patrón estacional, pueden hallarse a lo largo del año. Se desarrollan con el calor y humedad y las plantas favorecen su reproducción. El hongo Alternaria está presente todo el año, pero las esporas se liberan en grandes cantidades en agosto y septiembre.

Hay tres factores que favorecen el crecimiento de los hongos:

  • Humedad
  • Oscuridad
  • Acúmulo de polvo y materiales orgánicos

¿Cuales son los síntomas de la alergia a los hongos?

La mayoría de las alergias a los hongos en niños presentan síntomas de modo perenne, aunque en nuestra zona, la máxima concentración de esporas de Alternaria en el ambiente, se produce durante los meses de verano y por tanto, el pico de sintomatología de estos pacientes también: Estornudos, lagrimeo, tos, picor de ojos, nariz y garganta, ojos enrojecidos, rinorrea, ruidos torácicos (pitos o silbidos), dificultad respiratoria..etc

¿Cómo se diagnostica la alergia a los hongos?

El diagnóstico de alergia a hongos puede ser difícil de realizar, probablemente porque los extractos comerciales disponibles hasta el momento para procedimientos diagnósticos no son muy eficaces. Con los hongos no está claro cuál es la fuente original sensibilizante, si los micelios, las esporas o sus metabolitos, por lo que no está claro cómo se deben producir los extractos con actividad antigénica ni como son los métodos más adecuados para su estandarización. Además, existe una gran variabilidad antigénica en las cepas fúngicas. Por todo esto, la hipersensibilidad inmediata a hongos tiene importantes dificultades en el diagnóstico y aún más en el tratamiento específico mediante inmunoterapia.

¿Cual es su tratamiento?

El tratamiento de los enfermos con patología respiratoriaproducida por alergia a hongos, al igual que la causada por otros aeroalergenos, se basa en tres pilares fundamentales que se complementan:

  • Medidas preventivas
  • Farmacoterapia
  • Inmunoterapia.

El tratamiento farmacológico es el segundo escalón en el tratamiento de la enfermedad alérgica. Los fármacos actualmente empleados en el tratamiento del asma se pueden dividir en fármacos antiinflamatorios (corticoides, cromonas y antileucotrienos) y broncodilatadores. La indicación de uno u otro de estos fármacos dependerá de la gravedad de la enfermedad. La inmunoterapia es hoy por hoy el único tratamiento etiológico de las enfermedades alérgicas respiratorias mediadas por anticuerpos IgE específicos.

Como medidas preventivas recomendamos tenga en cuenta las normas que a continuación se detallan:

  • Evitar la vegetación tupida alrededor de la vivienda.
  • Eliminar las hojas muertas y evitar el contacto con el césped.
  • Evitar el acúmulo de restos orgánicos cerca de la casa.
  • Evitar la estancia en habitaciones húmedas (sótanos, graneros, bodegas) y no usar humidificadores. Las zonas húmedas de la casa deben ser aireadas, utilizando en ellas pinturas antimohos.
  • Evitar plantas de interior y flores secas de adorno.
  • Los frigoríficos también permiten el desarrollo de hongos. Se debe frotar las junturas con aceite vegetal.
  • Evitar el almacenamiento de alimentos así como evitar la ingesta de alimentos contaminados con moho o aquellos que los contengan (queso, fruta seca, vino, cerveza)
  • Los humidificadores y los aparatos de aire acondicionado favorecen el crecimiento de los hongos. Hay que limpiarlos con frecuencia y lavar los filtros con soluciones antifúngicas.
  • Limpiar las tuberías y desagües de lavadoras y fregaderos.
  • Si tiene secadora, controlar la zona de expulsión de aire.
  • Antes de guardar la ropa en el armario, debe secarse ésta por completo.
  • No guardar calzado húmedo. Por las noches, dejar el calzado fuera de la habitación.
  • Evitar los lugares con vegetación espesa, muy sombríos y húmedos.
  • Evitar la exposición al polvo doméstico.
  • Evitar alfombrillas y demás antideslizantes en la bañera, sustituyéndolos por líquido antideslizante

Artículos relacionados

Comentarios

¡Sé el primero en comentar!