Obra de teatro infantil para representar en el colegio: El Árbol de la Navidad

Cada diciembre, los colegios se visten de luces, villancicos y ensayos apresurados. Nada une más a los niños que preparar una obra de teatro navideña. "El Árbol de la Navidad" es una representación sencilla, llena de ternura y cargada de enseñanzas. Inspirada en un cuento clásico europeo, esta historia narra el anhelo de un pequeño abeto por ser especial, para terminar descubriendo que el valor de cada uno no está en lo que aparenta, sino en lo que puede dar a los demás.

Con pocos personajes, un mensaje conmovedor y un final lleno de magia, esta obra es ideal para alumnos de Educación Infantil o Primer Ciclo de Primaria. A través del teatro, los niños no solo se divierten, sino que también aprenden a respetarse, colaborar y emocionarse con lo verdaderamente importante: el espíritu de la Navidad.

Obra teatral infantil: El Árbol de la Navidad

Personajes:

• Narrador/a
• Abeto pequeño
• Abetos grandes (2)
• Pájaro
• Conejo
• Ardilla
• Leñador
• Niña
• Mamá
• Papá

Escena 1: En el bosque

Narrador/a: En lo más profundo del bosque, vivía un pequeño abeto. Era bajito, delgaducho y sentía envidia de los abetos altos y frondosos que le rodeaban.

Abeto pequeño (triste): Ojalá fuera grande y bonito como ellos. Quizá así podría ser el árbol de Navidad de una casa con luces y regalos...

Abeto grande 1 (riendo): Pero si eres tan enclenque que ni una guirnalda podrías sostener.

Abeto grande 2: Nadie querrá llevarte. Mejor sigue creciendo... si puedes.

Narrador/a: El pequeño abeto bajó sus ramas, avergonzado. Pero pronto llegaron sus amigos del bosque.

Pájaro: ¡Hola, abeto! Tu sombra me protege del viento. Me encanta posarme en tus ramas.

Conejo: Yo juego a tu alrededor cada mañana. Eres mi escondite favorito.

Ardilla: Y yo guardo mis bellotas junto a ti. Eres especial, aunque no lo creas.

Abeto pequeño (sorprendido): ¿De verdad creéis que sirvo para algo?

Todos: ¡Claro que sí!

Escena 2: La llegada del leñador

Narrador/a: Un día, un leñador entró en el bosque con una misión.

Leñador: Busco un pequeño abeto para una familia humilde. No tengo dinero, pero quiero darles una alegría.

Narrador/a: Miró a su alrededor y vio al pequeño abeto.

Leñador: ¡Perfecto! Este árbol cabe en mi trineo y es justo lo que necesito.

Abeto pequeño (asustado): ¡Oh no! ¡Me va a cortar!

Pájaro: No tengas miedo. Serás feliz.

Conejo: Vas a conocer el espíritu de la Navidad.

Ardilla: Brillarás más que nunca.

Narrador/a: Y así, el leñador lo llevó consigo.

Escena 3: En la casa humilde

Narrador/a: La casa era pequeña, pero estaba llena de amor.

Niña: ¡Mira, mamá! ¡Tenemos un árbol!

MAMÁ: Es el más bonito que he visto. Vamos a decorarlo con lo que tengamos.

PAPÁ: Y colgaremos deseos en sus ramas.

Narrador/a: Con papel, lazos y mucha imaginación, lo convirtieron en el árbol más especial.

Abeto pequeño (feliz): Nunca había sentido tanta alegría. Pensaba que ser grande era lo importante... pero lo importante es dar felicidad.

Moraleja

El cuento de "El Árbol de la Navidad" enseña que no necesitamos ser los más grandes ni los más brillantes para ser valiosos. Lo esencial está en lo que somos capaces de aportar con generosidad, sencillez y corazón.

Actividades para los niños tras la representación

1. Preguntas de comprensión:

• ¿Por qué se sentía triste el pequeño abeto?
• ¿Qué le dijeron sus amigos del bosque?
• ¿Qué hizo el leñador?
• ¿Cómo reaccionó la familia al recibir el árbol?
• ¿Qué aprendió el abeto al final?

Enlace a otras obras y cuentos navideños

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