Estimulación del pezón

La estimulación del pezón se ha documentado en los textos médicos para la inducción del parto ya en el siglo XVIII. En los últimos años se ha vuelto más aceptado por los médicos como una forma de estimular las contracciones, especialmente si se ha roto aguas.

¿Qué efectos tiene la estimulación del pezón?

Cuando se estimulan los pezones de la mujer, provoca una liberación de la oxitocina, la hormona natural que hace que el útero se contraiga y ayuda a madurar el cuello uterino. Sin embargo, no se aconseja esta práctica, porque las contracciones que provoca aunque suelen ser leves, podrían alcanzar un nivel elevado de intensidad y frecuencia y tener un efecto negativo o peligroso para la madre o para el bebé. No obstante, la estimulación del pezón es útil para la contracción del útero después del alumbramiento de la placenta y para la disminución de la hemorragia posparto, que es el mismo efecto que si se coloca al bebé sobre el pecho para amamantar. Normalmente la madre siente estas contracciones cuando su hijo está amamantando. Otras causas que producen contracciones uterinas en el tercer trimestre, incluyen el orgasmo, la estimulación del pezón por la pareja, la deshidratación ó las infecciones del tracto urinario. Debes acudir al hospital si tienes contracciones uterinas regulares y estás de menos de 36 semanas de gestación. Ana Tejeda. Matrona