Semana 35

Mi cuerpo cambia

Una buena higiene es la mejor garantía frente al riesgo de infecciones. Cuida la higiene corporal, y la higiene íntima en particular (evitando los lavados vaginales, que están totalmente desaconsejados). ¿Notas que transpiras más? Para evitar micosis (infecciones por hongos) e irritaciones enla piel, sécate bien las zonas de pliegues cutáneos tras la ducha o baño (codos, axilas, muslos, ombligo, ingles...). Para mantener secas esas zonas, recurre a los polvos de talco o la arcilla en polvo.

Visitas médicas

Ten preparada y a mano toda tu historia clínica del embarazo, te la pedirán cuando llegues al hospital.
Certificado de nacimiento, Libro de Familia, Cartilla de la Seguridad Social... Debes informarte antes de que nazca el bebé de todos los trámites burocráticos a seguir para inscribir a tu hijo como ciudadano de pleno derecho. Tu hijo también tendrá sus documentos.

Mi bebé crece

Tu bebé tiene 33 semanas de vida mide 45 centímetros y pesa alrededor de 2.600 gramos. El bebé desarrolla su sentido del gusto, su tubo digestivo y sus riñones bebiendo constantemente líquido amniótico.
Su sistema digestivo ya está formado, y sus intestinos están llenos de una sustancia verdosa llamada meconio y que eliminan por el recto al nacer. Los niños que nacen de nalgas suelen eliminar el meconio antes de nacer debido a la compresión del abdomen en el canal de parto.

A tener cuenta

¿Pecho o biberón? Infórmate acerca de ambas formas de lactancia y piensa en la solución que mejor os conviene a ti y a tu bebé. Háblalo también con tu pareja. Son muchos los motivos que aconsejan dar de mamar al bebé. Pero, en muchas ocasiones, por razones médicas, psicológicas, sociales o laborales no se inicia el amamantamiento, o, si se hace, se suspende precozmente. Hoy en día, la lactancia materna ya no es una cuestión de supervivencia. Alimentar al recién nacido con leche artificial es también una alternativa válida.